Un total de 2.5 millones de personas, en su mayoría mujeres y niñas, están atrapadas en las redes de la esclavitud moderna, de acuerdo con informes de las Naciones Unidas, aseguró la ministra de Relaciones Exteriores, Isabel de Saint Malo de Alvarado.
Para la ministra de Saint Malo, no es un tema de las mujeres, sino de la sociedad, por lo que habrá que enfrentar coordinadamente el reto social abordando el tema con todas las instituciones a través del llamado que hace el Instituto Nacional de la Mujer (INAMU).
Tanto hombres y mujeres, que persiguen el anhelo de mejorar sus condiciones económicas, mediante engaños caen en manos de los traficantes, por lo que sus vidas quedan destruidas.
Las autoridades panameñas tendrán que tomar todas las medidas pertinentes para defender los derechos humanos de las víctimas ante este flagelo y no quedarse atrás y mirar hacia otro lado.
Prestarle asistencia humanitaria, jurídica, financiera y, sobre todo, prevenir futuros casos forma parte de las tareas que deberán accionar las instituciones de Estado.
Por su parte, el fiscal especializado contra el Crimen Organizado, Nahaniel Murgas, indicó que el delito de la trata de personas se ha incrementado en el mundo.
En el caso de Panamá, se utilizan las fronteras para el delito, ya sea para trata sexual o laboral.
“Es de resaltar que a raíz de la implementación de la Ley 79 del 9 de noviembre de 2011 hemos tenido en nuestro país grandes avances que han logrado poder identificar grupos organizados que se estaban dedicando desde hace años al traslado de víctimas para la explotación laboral o sexual”, dijo Murgas.
Firmaron la vicepresidenta de la República y Canciller, Isabel Saint Malo; el presidente de la Corte Suprema de Justicia, José Ayú Prado; el presidente de la Asamblea Nacional, Rubén De León; el viceministro de Seguridad Pública encargado y presidente de la Comisión Nacional contra la Trata de Personas, encargado, Rogelio Donadío, y el representante para la Oficina Regional de Centroamérica, Amado Philip de Andrés.
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